Seguridad en casa

Hay pequeñas ideas que aumentan la seguridad en casa, y al vivir con niños esto es indispensable. Todos los productos de seguridad deben estar homologados según la normativa europea.

Puerta principal y pasillo.
Aparte de los consejos obvios, como no abrir la puerta a desconocidos y asegurarse de cerrarla bien debemos controlar si el niño llega al pestillo principal. En caso de que llegue e incluso tenga la fuerza de abrirlo deberemos instalar otro, o cerrar siempre con llave.
Recomendamos poner pegatinas en las puertas de cristal para que puedan apreciarse fácilmente.
Es bueno disponer de interruptores al alcance de los niños en las zonas por las que pueda necesitar ir de noche.
Suelo.
Las superficies pulidas pueden ser resbaladizas para los más pequeños y las alfombras también son capaces de hacerlos caer si van con poco cuidados. Para ambos casos unas pegatinas adheridas al suelo nos pueden solucionar el problema.
Cuantos menos obstáculos hayan bloqueando el paso y por el suelo, como juguetes o muebles fuera de su sitio, mejor.
La moqueta requiere una revisión de vez en cuando para evitar tropiezos por arrugas o agujeros.

Escaleras
Hasta los tres años los niños no tienen total movilidad para bajar por una escalera. Utiliza barreras de seguridad donde creas conveniente: al pie, en la puerta de la habitación del niño, en el descansillo.
Puedes ir cerrando y abriendo zonas según por dónde te interese que el niño juegue. La distancia entre barrotes no debe ser superior a 6,5 cm. Por otra parte, y teniendo en cuenta que los niños suelen imitarnos, no saltes por encima de las barreras.
Comprueba periódicamente la firmeza de las barreras: muy probablemente el niño termine dominándolas y apoyándose en ellas.

El mejor consejo siempre es prestar atención: a las costumbres del niño, al material de seguridad que mejor se adapta a tu casa… al fin y al cabo es el entorno donde más tiempo pasan.

Fuente: hogarutil.com